ALERTA EXTEMPORÁNEA DE CARENCIAS DEL SECTOR ENERGÉTICO
Las últimas semanas estamos leyendo que la presencia económica peruana nos advierte que habrá carencias en corto y mediano plazo en el sector energético, tanto en electricidad como en gas natural (GN), que está muy relacionado con la generación eléctrica, dado que el 60% de la producción fiscalizada de GN se destina a producir electricidad.
Se aduce que la ausencia de exploración gasífera es la causa, pero se cuidan en mencionar que los contratos de exploración y explotación de GN y líquidos de gas natural (LGN) de los principales lotes productores (88/ Camisea y 56/Pagoreni), operados por la argentina Pluspetrol, no ha hecho actividades exploratorias en las más de dos décadas dedicados a la explotación.

Los contratos no lo exigían, y todos los gobiernos que han pasado por el poder le han tenido temor reverencial para exigir una renegociación.
La situación actual del GN es que en el lote 88, que es el único que tiene respaldo legal para otorgar precio preferencial a las eléctricas (45% menor que los demás consumidores) solo tiene reservas probadas de 14 años, lo que es una limitante a las termoeléctricas a GN, que evalúan sus proyectos en un horizonte de 20 años.
Por otro lado, en el lote 56 dedicado a la exportación de gas natural licuado (LNG), las reservas probadas alcanzarán 6 años más, y el respaldo que le brinda el lote 57, le daría solo 1 año más de suministro.

Se propagandiza que se pondrá en operación el lore 58 (a cargo de la china CNPC), que no tiene precio preferencial para la generación eléctrica. Lo que no se dice es ¿cuál será el destino? El incentivo económico está en la exportación dado que el LNG tendrá altos precios sostenidos en el mercado internacional, por los embargos a Rusia.

En electricidad, en el segundo semestre del 2026, a pesar que el operador del sistema nos dice que es en el 2027, habrá carencia de producción de bajo costo (renovables, hidroeléctricas convencionales y termoeléctrica a GN), y entrarán a operar inexorablemente termoeléctricas a petróleo diésel 2, cuyo costo variable de producción es 8 veces que las termoeléctricas a GN.
Los propagandistas de la supuesta sobreoferta eléctrica y los opositores a más oferta renovable, ahora salen a darnos lecciones de planificación.