DISPUTA DE FÓSILES Y RENOVABLES EN SUPUESTA RECTA FINAL
César Gutiérrez
En el Congreso peruano cada semana se publica un supuesto listado de temas a debatirse, lista de lavandería, hablando en términos hoteleros por si acaso. También se menciona una lista priorizada, los que presumen con el spanglish le llamarían “short list”.
Pero en definitiva “lo que acuerdan los portavoces se queda entre portavoces”, adaptación de frase usada en Las Vegas. Los ciudadanos recibimos rumores, que dicen que en los próximos dos días se decidirá la suerte de las energías renovables (RER).
El tratamiento de las RER se ha discutido durante 3 años, en una confrontación con fósiles, tanto a nivel de productores, transportistas, distribuidores y generadores termoeléctricos a gas natural (GN). El debate tiene dos ámbitos: macro y micro.
En lo macro, los fósiles se suben a la montaña a predicar que las RER son fuente de todos los males para el sector electricidad, y en micro, incursionan en la modificación del dictamen aprobado en la Comisión de Energía y Minas del Congreso. Por el momento me centraré en lo macro.
Los argumentos de lo imprevisible de la oferta de las RER y de su impacto en la regulación de la frecuencia, tienen respuesta satisfactoria: los bloques horarios son la solución y sobre la frecuencia la salida va por el pago de servicios complementarios-
Los que más incertidumbre generan son los fósiles, predican que las reservas de GN alcanzan para 15 años, no hay ningún atisbo de nuevos hallazgos, solo promesas incursionando en Parques Nacionales y Áreas Nacionales protegidas como el Candamo, o es que guardan bajo la manga información sobre reservas para negociar regalías más bajas.
Prometen los fósiles del transporte un gasoducto costero con reservas para 15 años, antes decían que el Gasoducto Sur Peruano era inviable por falta de reservas, y no dicen si asumirán bajo su costo y riesgo la ampliación de capacidad de los primeros 200 Km del gasoducto Camisea-Lima y la Planta de Separación de Malvinas.
Incrementará la incertidumbre si el Ministerio de Energía y Minas decide otorga a dedo la distribución en regiones a la concentración gasífera colombiana, olvidándose del catecismo de la concentración horizontal que pretendieron aplicar en la distribución eléctrica en Lima.
En resumen, las dudas están en el terreno de los fósiles.